Se acaba un año, un año más que no ha dejado indiferente a nadie, pero pese a la incertidumbre que podemos llegar a tener, muchos de nosotros estamos pensando en realizar la típica lista de propósitos para el nuevo año.
Adelgazar dos kilos, pasar más tiempo con la familia, acaba la carrera, sacarme el “maldito” título de inglés que tengo atascado desde hace años… estos son algunos de los propósitos más habituales que podemos encontrar en la lista de los años anteriores.
Los propósitos u objetivos son pequeñas dosis de esperanza, que nos ayudan a darle sentido a nuestros días, mantener nuestra mente ocupada, y por supuesto, nos ayudan a sentirnos realizados cuando los conseguimos.
Pero este año marcado por la incertidumbre, puede ser que tengamos algunos problemas para marcar nuestros objetivos. Para realizar una buena lista de propósitos, primero vamos a echar la vista atrás y vamos a utilizar algunos de los aprendizajes que nos ha dejado esta pandemia.
Si nos trasladamos a principios de marzo, cuando todos estábamos volcados en conseguir aquellos objetivos que nos habíamos marcado apenas tres meses antes, de repente, todos nuestros planes se fueron “al traste”. La pandemia nos obligó a parar, a parar en seco y nos enseñó que no tenemos el control de todo, y que, por lo tanto, todos nuestros planes, objetivos, propósitos… no solo dependen de uno mismo, dependen también de las circunstancias. Por eso, este año, nuestra lista de propósitos va a ser más corta que las de los otros años, no porque debamos tener menos objetivos, sino porque por cada objetivo debemos crear planes, un plan A, plan B, incluso plan C, para conseguir un mismo objetivo. Estos planes nos ayudarán a tener más opciones y a mejorar nuestra resiliencia frente a las adversidades que nos podamos encontrar este próximo año.
PROPÓSITO 1: LLEVAR UNA VIDA SALUDABLE: COMER SANO E IR AL GIMNASIO.
Plan A: realizar un menú semanal e ir al gimnasio dos veces a la semana.
Circunstancia: cierran los gimnasios.
Plan B: realizar un menú semanal y realizar ejercicios tres veces en semana en la montaña o en el parque.
Circunstancia: nos confinan de nuevo.
Plan C: realizar un menú semanal y realizar tablas de ejercicios online tres veces en semana.
¿Cómo deben de ser mis propósitos?
Diferentes estudios y encuestas revelan que la mayoría de los propósitos que nos marcamos a principio de año, no son cumplidos finalmente. Las causas pueden ser diversas, hoy vamos a ver de qué manera debemos redactar y enfocar nuestros objetivos en general:
- Los propósitos no deben de ser obligaciones. Las obligaciones tienen una connotación negativa que nos hacen sentir mal por no haberlo hecho antes. Debemos marcarnos objetivos que nos motiven, que podamos disfrutar de ellos.
- Elimina la palabra “debería” de tu lista, ya que esta palabra indica sentimientos de culpabilidad y de falta de decisión.
- Todos los objetivos deben ser realistas, que se adecúen al momento personal en el que te encuentras y a las circunstancias que te envuelven. Si te marcas propósitos poco realistas, lo único que conseguirás será alimentar tu frustración.
- Invierte tiempo en crear tu lista de propósitos, hazla bonita y ordenada. Cuélgala en un lugar donde la puedas ver todos los días, por ejemplo, el espejo del baño o en la nevera.
- Establece pequeñas metas dentro de cada propósito, y no te olvides de darte una buena recompensa cuando las cumplas.
- No olvides que no tienes que demostrarle nada a nadie, esta lista es únicamente por y para ti.
Este 2020 nos ha enseñado que en los pequeños detalles de la vida son donde realmente encontramos nuestra ansiada felicidad. Utiliza aquellas cosas que has echado de menos este año, para elaborar la lista de propósitos del año que viene. Crea una lista de autocuidado, no de autoexigencias, esta lista te hará sentir mucho mejor y será mucho más fácil de conseguir los objetivos que te propongas.
Gracias 2020 por haberme hecho llorar, reír, disfrutar, enfadar, … Gracias por haberme hecho sentir y sobretodo valorar.
2021, no espero nada de ti, todo lo que espero sé que está en mí.